Siempre es un placer para cualquier músico subir al escenario y escuchar a miles llamándolo por su nombre, verlos (a algún porcentaje de los miles) ansiosos por la espera, gesticulando las letras de sus canciones. Mucho más emocionante debe ser que haya más de tres generaciones cantando sus rolas, las que se hicieron populares hace casi cuatro décadas.

Así sucedió anoche, cuando eltour Rock of ages 2012 llegó a nuestra ciudad para alegrar los oídos de los fans del hard rock y el glam metal clásicos deDef Leppard y Poison. El público iba desde niños de los cinco años (que aparentemente se sabían de memoria los temas, tanto que en algún momento uno subió al escenario y coreó la canción a la perfección) hasta cincuagenarios, contemporáneos de la banda que iban acompañados de sus hijos de veintitantos años.

La noche inició con el espantoso tránsito de avenida de Las Granjas que impedía la llegada puntual a la Arena; quienes se quedaron atorados se perdieron ‘Look What the Cat Dragged In’, la primera de Poison.

La banda lidereada por Bret Michaels –quien traía bien colocado en la frente su paliacate rojo, la bandera de Estados Unidos en los pantalones y la de México entre su mano y el micrófono– tocó poco más de 70 minutos. En su set integró temas como ‘Fallen angel’, ‘Every rose has it’s thorn’, ‘Talk dirty to me’ y ‘Nothin’ but a good time’.

Los estelares de la noche subieron al escenario tras el grito del público que seguía un cronómetro en reversa. 8: 7: 6: 5: 4: 3: 2: 1. Luces apagadas. ‘Undefeated’ (Mirrorball Live and More, 2011) fue la elegida para iniciar un concierto en el que sonaron éxitos que abarcaron desde su segundosegundo álbum de estudio (High ‘N’ Dry,1981), como ‘Let It Go’, hasta el octavo cd que lanzaron (X, 2002), del que tomaron ‘Now’.

Arriba del escenario en forma de T estaban aquellos rockstars que hoy son representados en la película protagonizada por Tom Cruise, cinta que lleva el mismo nombre de la gira que inició en junio pasado. Largas melenas, peinados altos, rostros maquillados, micrófonos forrados con brillantes, mezclilla y cuero, torsos desnudos: los ingredientes necesarios de una noche glamera-metalera como ésta.

Cerca de la mitad del concierto, Joe Elliott caminósobre el escenario para presentar un set acústico en el que incluyó algunas rock ballads que fueron coreadas por todos. Empezaron con ‘You can’t always get what you want’, continuaron con ‘Where does love go when it dies’, ‘Now’, ‘When you love and hate collide’, ‘Have you ever needed someone so bad’, y finalizaron con ‘Two steps behind’.

Elliot pidió a quienes no dejaban de corear, aplaudir, tomar fotografías y levantar los brazos al ritmo de la guitarra a que se transportaran a otra época, que hicieran mucho ruido. Y así fue hasta pasadas las 11 de la noche, momento en que los integrantes de la banda dejaron sus instrumentos, se acercaron al público para despedirse, le pidieron que posaran para tomarse una fotografía de recuerdo y dejaron el escenario.