Una voz aguda de timbre único, un físico imponente y un éxito planetario, “Rain and tears”: Demis Roussos, convertido en estrella mundial con esta balada de los Aphrodite’s Child, murió este fin de semana en Atenas a los 68 años, tras vender millones de discos.

Grabada durante la fecha icónica de mayo del 68, “Rain and tears” se convirtió en una de las grandes baladas de la música pop, junto a “Nights in white satin” de los Moody Blues y “A Whiter Shade of Pale”, de Procol Harum.

“La lluvia y las lágrimas son iguales”: así empezaba el tema, escrito por otra futura estrella, el gran compositor de bandas sonoras Vangelis Papathanassiou.

Cantada en inglés, “Rain and tears” dio a conocer la particular voz de Roussos y su capacidad para jugar con los agudos, en contraste con su masiva presencia.

El que llenó a rebosar las salas de Atenas tocando el bajo y la guitarra junto al grupo The Idols ya no abandonaría la escena internacional.

Nacido el 15 de junio de 1946 en la ciudad de Alejandría, Artémios Ventouris Rousos vivió en Egipto hasta que su familia regresó a Grecia en los años sesenta.

Incansable trotamundos, Demis Roussos cantó en decenas de países y dio innumerables conciertos: solo en 1975 realizó cinco giras, una cada mes y medio.

Con su melena, su barba espesa, y sus largas túnicas de colores vivos, Roussos cultivaba una imagen de patriarca ortodoxo desubicado. Su música siempre mantuvo las influencias orientales.

Cantaba en inglés, pero también en griego, español o francés, y vendió millones de discos en todo el mundo.

A partir de los años noventa, su carrera se frenó, debido en gran medida a sus problemas de salud. Sacaría un último disco en 2009.