Fui a un showcase de Selena Quintanilla en Boca del Río, Veracruz, un año antes de su muerte.

Mi mamá se ganó las entradas en la radio, nos llevó a mi hermana, a mi y hasta a una vecina. Selena no era tan famosa en ese momento, nunca se nos ocurrió tomar una fotografía o guardar los boletos, además yo tenía 4 años.

“No me gustaba tanto pero pues nos regalaron lo boletos y por eso fuimos”, recordó.

En internet, la mayoría de los registros de Selena son a partir del día que fue asesinada (31 de marzo del 95), si acaso existen videos del último concierto que dio en vivo, el 26 de febrero del 95 en Houston.

Su visita a Veracruz fue en el contexto del Día del Niño del 94 en un lugar llamado Privatt, que está en el boulevard de Boca del Río y fue uno de los primeros antros de la zona, incluso la playa que está frente a ese lugar se le conoce así, como Playa Privatt.

Más que un concierto de su gira Amor Prohibido era una actividad de la extinta radiodifusora Eco 103, que la invitó a una rifa de juguetes. Queríamos ganar bicicletas.

Esa frecuencia hoy la tiene Amor, de Grupo Acir, y el único dato que pudieron confirmar fue que, efectivamente, la chicana visitó Veracruz en el 94. En las hemerotecas digitales de periódicos locales como Notiver los registros más antiguos datan de 2006.

“Me acuerdo que bailó muy bien. La gente estaba muy emocionada de verla, le gritaban. Era muy alegre y tenía un cuerpazo”, agregó mi madre.

Nuestros boletos eran de la última sección y casi no veíamos nada; teníamos que estar de puntitas o brincando. Selena sacó los números ganadores y al final cantó dos o tres canciones, pero no puse demasiada atención a la música, todo fue muy rápido, el evento duró menos de dos horas.

Este fue mi primer concierto en la vida ¡y ni siquiera fue un concierto real!

Ella tenía 23 años y recuerdo haber pensado que tenía un trasero muy grande, llevaba unos pantalones negros entallados hasta la cintura.

“Estaba con su vestimenta típica de mallones y su bustier ese con brillitos, según yo iba toda greñuda jajaja”, recordó Patricia Díaz, la vecina que nos acompañó al evento.
Salimos de ahí muy tristes porque “Selena no nos regaló ningún juguete”. Pasó un año y vimos en la televisión que una fan la había matado, pero para nosotros en “tiempo niño” apenas si habían pasado días. ¡Pero si la acabamos de ver!

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