Despuésde una temporada un tanto extraña como la anterior, Lennon finalmente perdió algo de piso: grabó una sucesión de discos llenos de politiqueríabarata ("Woman Is The Nigger Of The World", rezaba algún título), casi es deportado de los Estados Unidos por un cargo completamente absurdo (la administración Nixon lo consideraba un "personaje subversivo") y seseparó de Yoko para irse a Los Ángeles de reventón.

Ni más ni menos queElton John fue el que lo volvió a poner en su lugar.