Damián Romero es el director general y artístico de Mutek México. Él vivió en Montreal la segunda edición de Mutek que surgió en tierras canadienses y tanta fue su emoción e inquietud que lo quiso replicar en México. Damián nos habló sobre los 10 años de este festival en el DF. Recuerden que del30 de septiembre al 6 de octubre,este evento se llevará a cabo en distintas sedes del DF.

¿Qué representa Mutek para ti?

Es evidentemente un proyecto de vida. Hablar de 10 años dedicándolos a algo, lo convierte en un proyecto de vida. Hoy cumple una etapa, estos 10 años los vemos como el punto cero de una nueva etapa del festival.

¿Cuál es tu labor en Mutek?

Hago muchas cosas, la planeación, curaduría artística en relación a los espacios, la gestión institucional, parte de la gestión comercial con mi socio Cory Crespo.

¿Cómo surge la idea de hacer este festival?

Fue una cosa orgánica y natural. Yo fui invitado en 2002 al Mutek, cabe mencionar que el Mutek es un festival de origen en Montreal que lleva 14 años realizándose en dicha ciudad. Yo fui invitado en 2002. El festival era tan íntimo que desarrollamos una relación con la dirección del festival. El festival tenía una visión hacia crear un triángulo entre las Américas y Europa. Mi vivencia en ese entonces fue tan profunda e inquietante de lo que vi y viví en relación a otros festivales, que inmediatamente quise empezar a desarrollarlo en México, sin modelo de negocio, ni franquicia, sino con una cuestión pasional y artística.

¿Cuáles son los grandes momentos de estos 10 años de Mutek?

Un gran momento del proyecto fue en 2005, estuvimos trabajando y haciendo intervenciones en el Espacio Escultórico, en el Tamayo de Arte Contemporáneo, en el Museo de Historia Natural, ésa fue una gran edición, con invitados de todo el mundo, fue el comienzo real, había mucho más pasión que otra cosa, todo esto tuvo una progresión, 2006, 2007, 2008, también fueron muy buenas ediciones, hay tantas historias del proyecto que es difícil decir cuáles son los grandes momentos del festival.

¿Cómo ha cambiado el público de Mutek?

El público que tenía Mutek hace 10 años, hoy está haciendo labores del hogar la mayoría y están poco involucrados en la participación enérgica con el proyecto. Hoy puedo decir que el 90 por ciento del público son nuevas audiencias, jóvenes que están respirando tecnología, que tienen una megabiblioteca que es el Internet, más la gente que viene a ver el Mutek, no por un artista, sino por venir a vivir nuevas experiencias en este festival.

¿Qué es lo imperdible de esta edición del festival?

Les recomiendo arduamente la primer gran noche del festival que es Brandt Brauer FrickEnsemble en el Teatro de la Ciudad, es una orquesta que sin el uso de ninguna computadora hacen tecno, es algo padre, muy único. Matmos,RaimeyHerman Kolgentambién en el Teatro de la Ciudad es altamente recomendable. El cierre es la presentación deAmon Tobin, es una experiencia que yo ya la vi y no encuentro un similar. Es el cierre del festival, les aseguro que es algo que jamás han vivido antes a nivel espectáculo.

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