Desde un día antes de su presentación en el Palacio de los Deportes se respiraba britpop entre la fauna chilanga, varias decenas de fans se postraron a las afueras del Hotel St. Regis para lograr la firma de Damon Albarn o una selfie, los más férreos, hasta dormitaron por la noche con acetatos en mano y consiguieron su objetivo.
Blur es una banda que ha sobrevivido a los cambios generacionales, musicales y hasta en sus entrañas (se agradece el regreso de Graham Coxon). Oasis y Pulp, sus principales rivales están actualmente extintos y no se ve cercana una reunión, gozan de fama y salud, son una leyenda viviente de los noventa y su música no caduca, hay frescura intacta en cada acorde, en las letras, en su propuesta.
El vocalista siempre ha sido fan de México, gusta recorrer sus calles, probar la gastronomía local, saludar a quien lo reconoce y hasta cantar covers de The Beatles en Garibaldi en las ocasiones anteriores que ha visitado la capital.
Sin embargo, Albarn, Coxon, Alex James y Dave Rowntree pisaron territorio azteca con un comportamiento más sobrio, centrados, ya no con el ímpetu británico; a sus 47 años, el vocalista ha madurado, creado proyectos alternos y hecho duetos históricos, pero su esencia pertenece a la cepa llamada Blur y con un nuevo trabajo bajo le brazo llamado The Magic Whip.
La línea 9 del metro, atascada de cuarentones, algunos con converse y chamarras de cuero (raro, porque en los noventa la moda eran las camisas de franela); algunos jóvenes aparecían, pero eran los menos (y son los que no sabían las letras).
Hello Seahorse pasó sin pena ni gloria como abridores. De pronto aparecieron cuatro siluetas y otros acompañantes, Albarn continúa como el sueño inalcanzable de las ahora señoras con alma britpopera; “Go Out”, “There’s No Other Way” y “Lonesome Street” desgañitaron a más de 17 mil 500 voces en el “Domo de Cobre”.
“Coffe & TV” desató una estampida en la pista. “Out Of Time” es una joya menospreciada del Think Tank (2003), minimalista en su estructura pero con gran contenido, pocos la reconocen pero es una de las mejores creaciones de la banda. “Country Sad Ballad Man fue una revelación, una rola que no era interpretada en más de una década y decidieron tocarla en “chilangolandia”…¡Simplemente asombroso!
Una marea de luces disparadas desde el escenario anegaron las tribunas, cientos de teléfonos móviles iluminaron las gradas mientras las notas de “Tender” se desplazaban, un tímido encendedor fue encendido por un hombre con más de tres décadas de existencia, su pareja sintió vergüenza por “renacer” al menos por un instante la antaña tradición y apagó el intento.
“Parklife” es un clásico (sin duda se escucha mejor con la voz del actor Phil Daniels), varios fans fueron invitados a bailar en el escenario (muy a la Belle & Sebastian) y uno portaba el disfraz de cajita de leche. “Song 2” casi destruye la pista, litros de cerveza volando (y agüita que no era de cebada también), miles brincando, las gradas sólo se cimbraban.

“Girls & Boys”, “For Tomorrow” y “The Universal” cerraron el festín de dos horas, Albarn se despidió con un “Gracias”, clásico en los ingleses a los que se les dificulta por naturaleza el español. Blur ha sobrevivido a pesar de sus altibajos, ahora, en la época millennial, son parte esencial de la escena musical actual.

Setlist Blur Palacio de los Deportes

-Go Out
-There’s No Other Way
-Lonesome Street
-Badhead
-Ghost Ship
-Coffee & TV
-Out of Time
-Country Sad Ballad Man
-Beetlebum
-Thought I Was a Spaceman
-Trimm Trabb
-Tender
-Ong Ong
-Parklife
-Song 2
-To the End
-This Is a Low
Encore:
-Stereotypes
-Girls & Boys
-For Tomorrow
-The Universal