Baxter dice:
Dirán que tiene los dientes cacarizos, cara de calavera, ojos de crack y actitud de Linda Blair, pero Amy Winehouse posee una voz que ya quisieran el 90% de las cantantes del mundo. En esta ocasión hace dupla con Quincy Jones (a quien tal vez recuerden como el hombre que creó el sonido de un tipillo llamado Michael Jackson) y como bien dice la letra del cover: es su fiesta y puede inyectarse sustancias si quiere. Lo hace muy, pero muy bien.

Yannina dice:

No quiero sonar burlona, pero me reí tanto cuando escuché esta rola, me parece la ironía más grande del mundo que Amy cante esta canción. Me gusta muchísimo su voz y su disco Back to black, pero ¿esta rola? ¿neto? la imagino como la loquita del parque con gorrito de cumpleaños cantándosela a ella misma, tipo la escena de Problem Child (Mi pequeño diablillo) donde la niña histérica llora por su cumpleaños arruinado. Pobre Amy, ojalá y se esté recuperando de su crisis droguis y haya hecho este cover como una burla a su situación y no como algo enserio.

Bart dice:

Soy un fanático perdido del soul y el R&B, pero de una época un tantito más para acá que la que nos trajo éstos sonidos. Quincy Jones es maravilloso porque puede hacer música con la Winehouse, Michael Jackson o con los músicos de jazz más experimentados de la historia. Pero aquí fallan. La Winehouse (que conozco muy poco) tiene una voz divertida pero la canción, desde su origen, no me gusta. No hay de otra.