¿Por qué es un mujerón?
Fácil: en los noventa, era la chica que todos queríamos tener. Tenía la capacidad de ser cursi pero también intensa, era rockera pero no era clavada, era talentosa pero no insoportable, ni inaccesible. Era canadiense.

¿Guapa, sexy o yo-qué-sé-que-qué-sé-yo?
Yo-qué-sé-que-qué-sé-yo. Porque, bueno, además de ser lo que todos nuestros grungeros selfs querían en los noventa, Alanis era bastante boconcilla y más bien fea. Igual, todos queríamos ir en el coche de “Ironic” (eso, hasta que se encueró en su siguiente disco… espantoso).

Si quisieras conquistarla tendrías que…
Componerle una rola hablando de la etapa más traumante de tu vida.

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