“Estar como un flan en continuo temblor.”

Es difícil pensar en una canción de pop noventera que no sea digna de burla. Pero estos chicos de suéteres a la cintura, con su canción Enamoradísimo, llevaron las similitudes entre el enamoramiento y el estado material de la comida a otro nivel. La del flan no es la única frase mala de la canción, eso de estar colado por ti, eres el máximo y eres la pimienta y la sal, cada día me dominas más también nos dejan sin palabras. Fue así como Mercurio arruinó uno de mis postres favoritos.