¿Recuerdan que hace algunos años un italiano flaco y con cero personalidad dijo que las mujeres mexicanas eran feas y bigotonas? Sí, hablamos de Tiziano Ferro, el que ahora "se armó de valor", decidió "salir del clóset" y aceptar públicamente su homosexualidad.

"Ya salió el peine", dicen los encabezados de diarios digitales. A las y los mexicanos nos queda claro por qué el autor de "Tardes negras" aseguró que no le gustaban las mujeres hechas en México. Porque no, no le gustan bigotonas sino bigotones…, altos y fornidos.

https://www.youtube.com/watch?v=XO9lyyXf3bI

"Mi voglio innamorare di un uomo", se lee en la Vanity Fair (ahhh, que tierno).

Pensamos que estamos a tiempo de explorar en nuestro repertorio Chilango y hacer chistes manchados sobre las vueltas que da la ruleta.

¿Se han dado cuenta de que el armario de la farandula se está quedando vació? Y eso no está mal, lo que si nos parece pésimo es que Tiziano primero nos haya torturado con sus canciones y ahora quiera hacerlo con su libro autobiográfico donde presume: "Soy gay y tengo la libertad de poderlo decir".

¿Por qué tanto castigo, Jebús?