Como
consecuencia de los ya de por sí sufridos embates de la erupción del
volcán Pacaya y la tormenta Agatha que afectaron a miles de personas,
la Ciudad de Guatemala empezó a agarrar un look espartano debido al
enorme agujero de 21m de diámetro y 31m de profundidad que se formó en
su Centro Histórico.

This is Spartaaaaaaaa!

La
falla provocó el derrumbe de una casa de tres pisos que, por fortuna,
no se encontraba habitada y el desalojo de todas las viviendas a 100m a
la redonda, lo cual provocó el enojo de sus habitantes, ya que aseguran
que las autoridades guatemaltecas no tomaron ninguna acción preventiva
cuando ellos denunciaron señales de hundimiento. Pero
como el hubiera no existe, ya no queda más que explicar las causas del
fenómeno: Según la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres
de Guatemala, el agujero puede ser consecuencia de una carga excesiva
de agua en el suelo y el sistema de drenajes debida a la tormenta y a
la acumulación de arena volcánica provocada la erupción.

Dicen que Sting ya anda preparando una rolita por si se repite el caso Timmy O’Tool.

Nuestra
teoría difiere un poco y, aunque ya nos explicaron que Arjona nació en
Antigua Guatemala (y no en la nueva), creemos que algo tendrá que ver
con esa casa y que, precisamente por eso, los dioses de la música y la
poesía enviaron el agujero en esas coordenadas exactas. El plan era
salvarnos de escuchar frases como "tuve sexo mil veces, pero nunca hice
el amor" o, peor tantito, "hay pingüinos en la cama por el hielo que
provocas" (WTF??), peeeeero como nuestros años son segundos en la
eternidad, pues les falló tantito y ya no lo encontraron ahí.

¡Apúrenle, se le anda ocurriendo algo!

Así
que tenemos tres conclusiones: 1. Debemos ayudar a Guatemala, 2. Arjona
tiene un pacto con el diablo y 3. Nuestra varias veces mencionada y
ampliamente apreciada sección "Dios, ¿por qué no mejor te llevas a
Arjona?" debe ser semanal.