México es un país que se distingue por la belleza de sus damas; así lo testimonian poetas, músicos, pintores (tanto de brocha gorda, como de brocha flaca) y artistas por igual. “¡Mujeres, oh mujeres tan divinas, no queda otro camino que adorarlas!”

Sin embargo, ¿cómo hacen las Venus de Chilangolandia para lucir tan exquisitas?, ¿cuál es el secreto de su perfección estética?, ¿en qué basan su adorable hechizo?

Nosotros los caballeros nomás no entendemos de dónde surge tanto primor (“Morena, ¡morenaza!, ¿así eres o te das grasa?”). Con el fin de resolver este misterio, nos hemos dado a la tarea de numerar las estrategias que siguen las mujeres para conservar el encanto natural que Dios les dio.

De tal modo, aquí les van algunos rituales de belleza que las descendientes de Eva celebran para estar en su punto y como quieren.

Para lograr un cabello angelical

Según algunas chicas avezadas en el tema, no hay rito más efectivo que cortarse el pelambre en luna llena para que crezca en un balance perfecto: una mezcla coqueta entre Gloria Trevi y Rigo Tovar (¡chulada!). Y si al final de la peluqueada se estimula el cráneo con puré de jitomate saladet, puede que hasta se logre una sedosidad estilo Changoleón.

Para corregir las impurezas de la cara

Un clásico entre los clásicos: el masaje exfoliador con una mitad de limón agrio y azúcar encima, sobre la carátula completa (la frente cacariza, los pómulos sebosos, la nariz porosa…), así hasta que el horripilante rostro quede como un exquisito rufle anaranjado.

Para aumentar la pomposidad

Si lo que se desea es incrementar el tamaño de las pompis, una de las prácticas más socorridas es la untada de vitamina E y aceite de pescado en las de acariciar, poco a poquito, hasta que queden más comestibles y más frondosas que las de Kim Kardashian.

Para eliminar la celulitis

He aquí una operación garantizada (al menos eso dicen las que saben de estos menesteres): pasarse la bomba destapacaño a lo largo de las piernas, haciendo presión y logrando un vacío uniforme, hasta eliminar esa horrible piel de naranja.

Para lucir un cutis tan perfecto como el de Cristiano Ronaldo

Sin duda se trata del ritual de rituales, casi casi podríamos afirmar que no hay mujer alguna que no lo haya intentado. Hablamos, por supuesto, de la aplicación de mascarillas que parecen vómito de escuincle tuberculoso: mezcla de aguacate, perejil, un diente de ajo y esperma de ballena (y no precisamente nos referimos al novio gordo).

Para esos codos rasposos

La sabiduría femenina posee grandes secretos, como éste para embellecer los codos que parecen rodilla de elefante: se sugiere apoyarlos durante diez minutos en medio limón con sal, unas gotas de tequila y un toque de miel. Si no quedan como suaves pancitas de bebé, al menos tendrán el sabor de un riquísimo coctel Margarita (“¡chúpale, pichón!”).

Para suprimir el molesto vello facial

Algunas nenas tienen más bigote que Zapata y Villa juntos, pero eso se soluciona con un rito sencillo: se mezcla una cucharada de polvo de cebada con leche y jugo de limón, en cantidades iguales; después, se coloca el menjurje en el mostacho de 20 a 30 minutos y… ¡adiós al hombre lobo!

Para desaparecer estrías

Un ritual no sólo necesario, sino también placentero: los baños de leche de burra en el patio de la casa, bajo el rayo del sol de las 12 de la tarde (si se puede, en viernes 13), para decirle adiós a las estrías. A decir de algunas chavas con desórdenes alimenticios, esto también elimina los jiotes de la piel.

Para incrementar el tamaño de las bubis

Fácil: la última noche del mes, se debe bañarlas con espuma de cerveza (resulta mejor si es negra de barril), aplicando un suave masaje en círculos, hasta lograr la exhuberancia de Lorena Herrera, o más aun, la del Piojo Herrera (¡aghhh!).

Para el acné de espalda

Disolver una aspirina en agua de horchata (no de sobre, sino elaborada con semillas de melón chino) y aplicarla con un algodón sobre cada grano pozolero, sin frotar, sólo haciendo presión hasta extraer toda la pus del cacarañado lomo.

Así la onda, hasta aquí llega este recuento. De modo que ahora ya lo saben, caballeros, por cada prodigio de hermosura que se ve en las calles, hay un ritual de belleza que lo explica todo. Y ustedes, divinas lectoras, ¿qué ritos ejecutan para ser cada día más bellas? Compartan sus secretos y sabiduría, que al fin nada les cuesta.

También checa:

Cine de vampiros y amor
Frases poéticas para enamorar
Día de hacerle el amor a la amistad