La muerte de Jimi Heselden, dueño de Segway Inc., ocurrida el fin de semana en su casa de West Yorkshire, cuando se cayó por un acantilado mientras andaba en uno de sus aparatitos nos obliga a hablar del tema.

Y no, sabemos que no está bien burlarse de la muerte de otras personas, a menos que haya sido muy divertida: como haber muerto ahogado en una alberca de gelatina o haber chocado contra un coche lleno de payasos. Y, afortunadamente, o desafortunadamente, cómo lo quieran ver, esos decesos ocurren con frecuencia.

A lo largo de la historia han ocurrido algunas muertes tan irónicas que es imposible no sonreír… aunque sea un poquito.

Nosotros les hablaremos de algunas de estas muertes irónicas –que nos harán ver lo digno que fue para Steve Irwin haber muerto por un piquete de raya látigo y queseguro habrían enorgullecido a Alanis Morissette–.

Yo espero que mi final les traiga una sonrisa a todos y que se escriban posts como éste celebrándolo (no a mí), hasta que se acabe el mundo… o el Internet.

Quítense la ropa negra y denle a siguiente.