“¡Aviso parroquial!

Si hay por acá algún extranjero sin plan de año nuevo (o mexicano que no tenga que pasarlo con su familia) que quiera cenar, reír y pasarla bomba tengo una buena noticia: en mi casa abrimos las puertas para el festejo (bueno, en realidad será en casa de mis papás, pero está mejor por que serán adoptados como parte de la familia).

El punto es que todo podamos pasar los últimos momentos del 2016 llenos de cariño. Si usted no tiene familia en la ciudad (por la razón que sea) nosotros le hacemos la suya”.

Este fue el estado que hace apenas unas horas mi amiga Marién colocó en su perfil de Facebook. Más de 170 likes y contando cosechó la publicación. No sé si lo sabía —tal vez sí—, pero a esta nueva forma de pasar las fiestas importantes se le llama “Orphan Party”. El término viene de “Orphan Christmas”, una modalidad de fiesta en que las personas no emparentadas por un lazo sanguíneo comparten las fiestas de fin de año, especialmente Navidad.

¿Quiénes acuden a una Orphan Party?

Según la página de www.orphanchristmas.com, su sitio es como un Tinder, pero para personas que no tienen con quién pasar Navidad. Nada sexoso ni de ligue, que para eso está el Tinder convencional. Sin embargo, no es necesario recurrir a esta página. Cualquier persona, —como mi amiga Marien— puede convocar a una “Orphan Party” en su casa y, con ayuda de las redes sociales, invitar a no-familiares a pasar las fiestas de fin de año.

Varias son las razones por las que las personas acuden cada vez más a ‘oprhan parties’:

  • Desintegración familiar: existen familias que ya sea por divorcios o por broncas entre familiares, no pueden o no desean pasar la Navidad juntos. Cada vez más es la gente que prefiere pasar las fiestas con amigos —las llamadas familias de elección— que con una familia que pasa estas fechas sólo por compromiso y por guardar las apariencias, aunque en el fondo no se traguen.
  • Situación geográfica: hay gente cuyos viajes coinciden con las fiestas decembrinas o que por cuestiones de chamba, se encuentran lejos de casa en estas fechas.
  • Estudiantes que se encuentran lejos: hay estudiantes que no tienen posibilidad de regresar a casa para las fiestas, para quienes estas celebraciones “alternas” resultan una buena manera de sentirse conectados y evitar depresiones o hasta suicidios (un fenómeno muy recurrente en estas fechas, por cierto, sobre todo entre jóvenes y y adolescentes).
  • Motivos económicos: afrontémoslo, aunque tengamos ganas de ver a nuestra familia y tengamos el tiempo para hacerlo, hacer un viaje en plena temporada alta resulta un gancho al hígado para el bolsillo.

En resumidas cuentas, una Orphan Party no es otra cosa que celebrar estas fechas con amigos o incluso desconocidos. Esta opción es para quienes no quieren perderse la magia de los abrazos, la deliciosa comedera y, ¿por qué no?, de los regalos.

Tips para una buena Orphan Party

Usa las redes sociales. Postea que tienes una fiesta para quien quiera caerle y no tenga dónde pasarlo en estas fechas, o pregunta a quién le puedes caer si es que andas lejos de casa y no puedes celebrar en familia. Recuerda el propósito con las que fueron creadas estas plataformas: ¡conectar personas!

Móchate con algo:

El hecho de que te estén invitando no significa que tengas que ser totalmente marro y nomás caerle a la gorra. No tiene que ser algo caro: puede ser la botana, la bebida o hasta algún obsequio para la casa. Que se vea la intención. Ahora que si tú eres anfitrión, ponte un alguito para botanear, pero si no quieres acabar quebrado, di que es fiesta de “traje” y que cada quien se moche con algo.

Ármate una buena playlist:

Recuerda que el 50% del éxito de una fiesta (o más) siempre será la música. Como es una fiesta en la que se espera todo tipo de gente, no monopolices la música, ármate un playlist previo que tenga de todo un poco para que todos puedan disfrutar, o de plano, ármate una tradicional “fiesta de iPods”, en las que todos pueden poner una o dos rolas de su cel o su reproductor de música y así tan tan, todos contentos.

Échate un speach cortito, pero llegador:

En estas fechas siempre dan ganas de decir unas palabras, sobre todo al calor de la emoción (y de las copas). Si eres anfitrión, haz hincapié en el “hoy por ti, mañana por mí”, para que la gente agarre la onda de que si todos hacemos cosas chidas, al final se nos regresan. Y si eres invitado, no olvides agradecer al anfitrión: no cualquiera le abre las puertas de su casa a un desconocido en estas fechas, y esto es algo que merece ser reconocido. Eso sí, no te cuelgues, que no se trata de dormir al respetable público.

¿Qué onda, se te antojó armar una orphan party? ¡Comparte esta nota con aquellos que van a pasar las fiestas lejos de casa!

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