Viernes

A tu llegada, disfruta de la brisa que llega de la playa. Lo ideal es que comiences por explorar el centro y te empapes del ambiente del lugar. En tu hotel o en la playa, puedes buscar la renta de un vehículo todo terreno que te llevará a un recorrido por la arena a alta velocidad.

El paseo te lleva por la montaña El Risacalillo; ahí tendrás que sortear lo accidentado del terreno, como la selva y las plantaciones de cocoteros. Gracias a ello tendrás acceso a playas vírgenes adornadas por el océano Pacífico.

Sábado

Si te quedaste en Zihuatanejo, es fácil llegar en taxi desde ahí a la Isla de Ixtapa. Te encontrarás con el espectacular embarcadero, en el que podrás ver cocodrilos de hasta tres metros de longitud, pero no te asustes, están bien cuidados en los criaderos.

Desde ahí te recomendamos rentar una lancha y embarcarte en un tour que te acercará a los mejores detalles de la isla. Será ahí donde podrás esnorquelear. Enseguida te enamorarás de sus aguas limpias y cristalinas.

A la hora de la comida estarás en el lugar indicado para disfrutar de unos deliciosos mariscos.

Domingo

No habrá despedida igual de Zihuatanejo, que una nadada con delfines.

Si bien puedes practicar el contacto de la naturaleza en las mismas playas, te recomendamos darte un paseo por este parque acuático, en el que aprovecharás al máximo la experiencia de poder nada con delfines y acercarte más a la vida natural de la región.

Puedes limitarte a acercarte a ellos y tocarlos, incluso bromear con ellos, o ser más atrevido y viajar tomado de una de sus aletas a toda velocidad por el agua.

¿Te lanzarías a Zihuatanejo? ¿Fuiste y no nadaste con delfines? ¿Qué otras cosas se pueden hacer? Compártenos tu experiencia.