¿Dónde las vimos?

En “María Mercedes”, parte de las trilogías de las “Marías”, que hicieron todavía más famosa a Thalía, quien acá era una pepenadora con una historia como de película de la edad de oro del cine mexicano.

¿En qué consistía su maldad?

Mística era la clásica lagartona, con un look muy de Jessica Rabbit, que a fuerzas se quería ligar al cachetoncito Jorge Luis del Olmo. Malvina era la hermana del interfecto (hermana en la vida real de Thalía), quien consideraba a Meche una pobre gata que quería adueñarse de la herencia de la familia y, por ende, debía destruirse.

Pero a la vez eran muy cool porque…

Mística SIEMPRE usaba la misma ropa: un vestido lentejuelado que la hacía lucir francamente ridícula. Malvina, no, ella no era cool: era una quedada cuarentona chaférrima.

¿Cómo destruirlas?

A Mística, fácil: destruyendo su vestuario (que, paradójicamente, sólo consistía en un vestido, unos guantes y un traje de spandex muy sexy). A la otra, presentándole un tipo que a la larga se convirtiera en “kept man” (o mantenido, que le exprimiera la lanota).