En una galaxia muy, muy lejana, hace mucho, mucho tiempo, ya habían
inventado la placa de neón. Y no, querido lector, no nos referimos a
Satélite y mucho menos a Lindavista (de donde salió Adrián Fernández,
orgullo nacional). Los verdaderos pioneros de la cultura de los autos
tuneados fueron los habitantes de Malastare, en donde también, los
arrancones eran una actividad ilícita.

El cruce de apuestas, las motocicletas y las guapas mujeres siempre
han sido una constante para este estilo de vida. No en vano, Anakin
Skywalker ganó su libertad en una de estas contiendas (muchachito
pendenciero). Luego vinieron otros como los Hermanos Rodríguez, Burt
Reynolds, el malora de Vanishing Point, Speedracer, y otros que se
creían bien acá por ponerle “NOS” a su coche. Niñatos que poco sabían de
turbinas anti-gravedad.

Sí, Sebulba le parte la madre a Vin Diesel. En cualquier momento y
cualquier lugar.