Año: 2000

¿Por qué vamos a recordarla?

Nadie la pelaba, nadie se dio ni cuenta de que existía una especialista en halterofilia, que nos representaría en Sydney, Australia. Hasta que en la Olimpiada llena de vacas flacas para México, el Nombre de Soraya puso a nuestro país en el medallero olímpico con una medalla de oro que hizo que el himno nacional sonara para el gusto de todos los mexicanos que incrédulos éramos testigos de la hazaña de esta gran deportista.