Este juego comenzó a arrancar los suspiros de muchos y eso que el PS3 aún no había salido a la venta. Después de la espera todas las fantasías se convirtieron en realidad. Kill Zone 2 además de ser un gran FPS tenía el poder cinematográfico de una película de James Cameron o Michael Bay.


Las gráficas eran algo que no se había visto hasta este momento, la luz, las animaciones, y los modelos de los personajes eran un deleite al ojo. Más allá de la atmósfera inmersiva pocos títulos te transmiten el sentimiento caótico y épico de una batalla que amenaza a un mundo entero. El modo de un jugador te proporcionaba una experiencia de adrenalina pero el multiplayer, gracias a que podía integrar hasta 32 amigos, era la sobredosis que te dejaría sin dormir varios días.

blood blood blood Necesitarás terapia para sobrellevar la emoción, ¿ya hiciste tu testamento?