Fiesta para uno

La reciente salida del disco Skyscraper, de Julian Plenti me emociona tanto como un disco nuevo de Interpol. Y es que parece que es justo eso. El único detalle es que este es el disco debut como solista de Paul Banks, quién por alguna extraña razón, decidió ir por la vida bajo el nombre de Julian Plenti. El rumor dice que la banda no iba muy bien y que mucho tiene que ver con el bajista, Carlos D, a quién acusan de tener un enorme ego y una personalidad un tanto excéntrica. Sea como sea, el disco suena a la banda neoyorkina, que puso de moda una vez más, el sonido más obscuro de Manchester. La comparación fue provocada por la voz del mismo Banks, que nos recuerda tanto a la de Ian Curtis. Si esto es una coincidencia o si fue algo que se planeó, da igual. El resultado es el mismo y es probable que jamás encontremos una respuesta. Lo que sí les puedo decir es que el sentimiento de soledad que se proyecta en Skyscraper, se mantiene a lo largo del álbum y viene desde la portada: Julian Plenti sentado sobre un sillón, en lo que parece ser ¿una fiesta para uno?. Drama. Julian Plenti suena a Interpol, la diferencia más notoria, es quizá la ausencia del bajo de Carlos D y que ahora la voz está en un primer plano. Ahora sí se alcanzan a entender las letras azotadas. El disco salió la semana pasada en Estados Unidos, pero Arts & Crafts México nos recomienda (a través de su Twitter), que nos esperemos un poquito por que la edición nacional (especial), estará a mitad de precio.

500 veces la misma película

El cine indie que se repite una y otra y otra vez.

Muero de ganas de ver la nueva película de Zooey Deschanel, 500 Days Of Summer. Principalmente por que amo a Zooey Deschanel, pero también por que es la nueva película indie, que al parecer, aplica todos los trucos de las demás películas indie, que tanto me gustan. Es una relación de amor/odio, por que sé que son trucos y sé que se hacen para que gente como yo caiga. Y efectivamente, soy muy débil y no me puedo resistir. ¡Siempre caigo! Sucede que esta película cuenta con un gran soundtrack, que obviamente va acompañado de varias referencias musicales dentro de la cinta. Pero lo que más ha llamado mi atención, juzgando por el trailer, son las referencias que encuentro un tanto forzadas. El avance inicia con el personaje de Joseph Gordon-Levitt escuchando a The Smiths, con audífonos, dentro de un elevador. Lo siguiente que vemos es al personaje de Zooey diciendo lo mucho que le gustan y cantando un cachito de “There is a Light That Never Goes Out”. Él, evidentemente, se enamora. Esto parece una broma. Es como si nadie hubiera visto Garden State, ¿O no? Ahí sucede lo mismo, con Zach Braff, Natalie Portman y The Shins. Aún dándome cuenta de todo esto, sigo leyendo cualquier nota que me encuentro, con respecto a la película. Les dejo aquí los dos videos que grabaron los protagonistas, uno para Cinemash, reinterpretando esa escena de Sid & Nancy:

y la especie de tributo al teatro musical (dentro de un banco), bailando al ritmo de “Why Do You Let Me Stay Here?”, de la banda de la misma Zooey, She & Him.

¿Ven? Sí me doy cuenta de su estrategia. Y hasta ahí todo iba bien, pero de pronto me topé con un par de fotografías en dónde Levitt viste no una, sino con DOS playeras de Joy Division ¿Qué de plano todos los melómanos nos vestimos igual? Si la respuesta es positiva, es algo que no quería saber. Es algo que vemos a diario, pero no de una manera tan agresiva. Al final igual me pondré mi playera y veré la película en su semana de estreno (Ojalá sea pronto). Por que sí, con todo y todo, soy el tipo de persona para quién se planeó todo esto. (Pero mejor que nos platique Josué, editor de cine, que ya la vio).

Hippies retratando hippies.

Un libro de rock en el que no encontramos gel y estoperoles.

Cómo detesto a las personas que en medio de un concierto, sacan su teléfono celular y empiezan a tomar fotografías del mismo, como si su teléfono tuviera un zoom del tamaño del Palacio de los Deportes. Entiendo que todos nos queramos acercar a nuestro artista, pero siento que esa diminuta camarita sólo nos separa y nos distrae de lo importante. Prefiero dejarle la chamba a alguien más. A algún profesional que tenga las puertas abiertas en momentos que nosotros no. Hay varios fotógrafos reconocidos que han tomado retratos y fotografías sobre el escenario de muchos artistas y músicos. En esta ocasión les quiero recomendar el trabajo de una chica que no es tan conocida, pero que ha tenido acceso a la intimidad de artistas como, principalmente, Devendra Banhart. Ella es Lauren Dukoff y Family es el libro en donde quedó documentado todo su trabajo. Lo edita Chronicle Books y además de las fotos de Devendra, pueden encontrar también a Vetiver, Little Joy, Joanna Newsom, Bat For Lashes y otros hippies más. Momentos íntimos en la gira, retratos formales para prensa, una que otra foto en vivo y hasta un par de siestas que quedaron atrapadas para la eternidad. Devendra Banhart y su clan de hippies, vistos desde la lente de una amiga cercana. No es el típico libro de rock con banditas retratadas y muchas guitarras casualmente acomodadas. Este es un libro agradable hasta para el que no está familiarizado con la música, pero claro se disfruta más si se acompaña con un disco de folk.

Más de la Reclu:

John Hughes, Wilco y Love Will Tear Us Apart

Mr. Fox, Retroactivo Records y G.I. Joe