‘El Wolverine’: el conductor más chido del Metro

¿Lo conoces?

Hace un par de semanas se volvió viral un video en el que un conductor del Metro daba un “singular” discurso antes de iniciar la marcha del tren. Fue reconocido por muchos como “el conductor más amable del Metro”, aunque no faltaron los malpensados que sugirieron que el conductor estaba borracho o que lo hacía por llamar la atención.

Sin embargo, ni lo uno ni lo otro. Mauricio Nares Vera es uno de esos pocos chilangos ejemplares que buscan hacer un cambio, y lo hace desde su trabajo.  Este conductor —que por su apariencia es apodado “El Wolverine— labora en la línea 3 del Metro y auxiliado por su peculiar estilo, se ha fijado como meta poner orden para que el viaje de todos los usuarios sea mejor.

Lo buscamos para charlar con él y esto fue lo que nos contó.

¿Cuánto tiempo llevas chambeando en el Metro?
Entré a trabajar hace 25 años, en 1991. Cuando yo inicié en el STC entré con el cargo de soldador, pero al año de haber ingresado al Metro se abrieron plazas para conductor y me apliqué. Pasé mis exámenes y el 8 de septiembre del 92 me convertí en operador. Entré justo en la época en que los veteranos ya tenían sus 24 o 25 años en el Metro, ahora se podría decir que ya soy uno de ellos.

¿Desde entonces hasta ahora te has mantenido como conductor?
Hace unos años tuve la oportunidad de cambiar a Jefe de Estación, pero prefiero el trato directo con la ciudadanía, esa es mi pasión. Es un trabajo muy bonito, de gran importancia. Es una gran responsabilidad también, porque llevas mucha gente, con una sola mano mueves esta gran maquinaria llamada Metro y con ella también muchas vidas.

¿De dónde salió la idea de transformarte en Wolverine?
Es chistoso, porque para trabajar yo siempre venía rasurado. Pero unas vacaciones me dejé la barba y ya cuando iba a regresar a trabajar, jugando, primero me la recorté tipo Abraham Lincoln y después como Wolverine. Mi esposa me dijo que no me la dejara así porque me iban a hacer bullying, pero quise probar. Primero un taxista sin que yo le dijera nada me dijo que me parecía, luego los niños en la calle y ya, entonces me metí en el personaje y llevo cuatro años haciéndolo.

¿Usas tu imagen para dar un mensaje?
Sí. Wolverine es un líder entre los X-Men, yo utilizo ese personaje como una manera de ser un líder también, para hacerme notar y escuchar. Yo no dirijo a los X-Men, yo trato de dirigir a la gente para que tenga un mejor comportamiento en el Metro y así todos tengamos mejores viajes.

¿No te hacen bullying, como decía tu esposa?
La mayoría de las veces la gente es respetuosa o lo toma a juego, y eso está padre. Pero llega un momento en que pasa del juego a la mofa y eso ya no es agradable. Una vez me llenaron la cabina de escupitajos; también me han tocado mentadas. Esa vez de los gargajos hasta me hicieron llorar, claro, lo hice sin que se dieran cuenta. Pero no se vale. Creo que hasta un héroe también siente, llora y se quiebra.

“Es muy triste que la amabilidad sea noticia”

Cuando tu video se hizo viral, algunos lo tomaron muy bien, otros llegaron a decir que estabas borracho. ¿Qué piensas de esto?
Para empezar es muy triste que hayamos llegado al punto en que la amabilidad sea noticia. Además te cuento que esto que yo hago no es nuevo: desde hace muchos años, yo daba anuncios usando los altavoces del Metro. Me acuerdo que cuando trabajaba en la Línea 2, el día que le hicieron un homenaje a Cantinflas en Bellas Artes, yo invité a la gente a que fuera, usando el sistema de sonido. También cuando había partido de México, a veces daba los resultados por las bocinas. Pero eran otros tiempos: los sistemas de altavoces funcionaban mejor y la gente tampoco lo tomaba como algo raro, al contrario, sonreían, me felicitaban.

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Wolverine Navideño

¿De dónde te nació la idea de usar los altavoces para eso?
Siempre he sido radioaficionado. Creo que si no hubiera sido conductor del Metro, hubiera sido locutor. Por eso me gusta dar anuncios y lo hago desde hace muchos años.

Pero ahora ya lo haces a grito pelado, ¿no?
Ah. Es que, como te digo, ahora los sistemas de sonido ya muchas veces fallan. Entonces me compré dos silbatos que son con los que llamo la atención. Ya cuando la gente voltea no ve a Mauricio Nares, sino a Wolverine. Ya que tengo su atención aprovecho para dar un mensaje, ya sea para permitir el libre cierre de puertas, para evitar a los carteristas o contra el acoso sexual.

“Estamos librando una guerra contra la indiferencia”

Hay quien dice, medio en broma y en serio, que tú deberías capacitar a tus compañeros conductores o a las taquilleras, porque muchos de ellos hacen su trabajo de mala gana…
Yo creo que es una cosa generalizada en el país, no sólo son los compañeros del Metro. Todo el mundo anda estresado y a las prisas. Los usuarios, por ejemplo, son mucho más groseros que antes, a las compañeras taquilleras les avientan monedas, les escupen sus taquillas o las ofenden cuando no hay cambio, como si la taquilla fuera un banco. Ellas llegan a las 4:30 de la mañana y tienen que lidiar con todo tipo de gente y están sometidas a mucho estrés. También la gente que se ponga a pensar un poquito en eso. Es un poco culpa de todos: de trabajadores y de usuarios. Pero en alguien tiene que cambiar la actitud, yo por eso pongo mi granito de arena para que la cosa empiece a cambiar.

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Uniformado

¿Qué recomendación le darías a los usuarios y a nuestros lectores?
Me encantaría decirles que estamos librando una guerra contra la indiferencia social, y nuestras armas son los valores como la solidaridad y la empatía. Hay que vivir en equidad, acabar con la discriminación y hacer no sólo del Metro sino de la ciudad un mejor sitio para todos. Si todos ponemos algo de nuestra parte, podemos abatir los problemas que nos aquejan. Entre autoridades y usuarios podemos crear un mejor entorno que nos beneficie a todos. Y a la empresa: ¡que nos arreglen nuestros trenes!, porque eso hará que todos tengamos un mejor viaje y lleguemos con una sonrisa a nuestros destinos.

Por último me gustaría dejarles la frase con la que inicio mis viajes: “Me respeto y respeto mi entorno, me educo y educo mi entorno; eso es tener un buen comportamiento, yo lo llamo actitud”.

 ¿Qué opinas del trabajo de el Wolverine de la línea 3′?

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