¿Cómo lo identificas?

Vas cómodamente sentado en un asiento del metro, que, por lo demás, no va demasiado lleno. El vagón se para en alguna estación, y entonces entra un señor con sombrero a punto de derrumbarse, camisa sucia, pantalón sujeto con una cuerda, pies descalzos y negros. Camina apresurado por los asientos, depositando en cada regazo un papel cuidadosamente pegado a dos paletitas. El papel dice: “Disculpe las molestias. Somos campesinos de la sierra de Puebla y no hablamos español. Como no tenemos medios para subsistir, le vendemos estos dulces por 5 pesos”, etcétera.

¿Qué quiere?

En un primer momento, vender. En un segundo, justicia social.

Es chocante porque…

Además de esta gente que sí necesita esto para subsistir, hay charlatanes que inventan ser sordomudos para usar la misma treta.

Su empleo alternativo:

En un mundo ideal, serían campesinos y podrían comer al mismo tiempo.