En los años ochenta había una película de terror increíble
que se llamaba "The Blob". Era una gelatina espantosa que se comía a la gente y
crecía sin parar. Eso sí: era lenta, lentísima. Pero, una vez que la veías a lo
lejos, sabías que te había cargado la mancha. Bueno: algo así está pasando en
el Golfeo de México: una enorme mancha, pero de petróleo, está nadando
lentamente hasta la costa de Louisiana. Y todo porque un barco que llevaba
petróleo se hundió. No se sabe bien a bien cuál es el daño real, pero lo van a
anunciar el 30 de abril.

¡Feliz día del niño ochentero, idiota!

Por otro lado, ese mismo día van a dar un diagnóstico de los
niveles de pederastia que hay en los Legionarios de Cristo. Now that’s what we
call karma.

¡Feliz día del niño (#NOT), Marcial! (idiota…)

Así que, bueno: en un mismo día sabremos que tan jodidos
estamos: nos dirán qué tanto se muere el planeta y qué tanto se ha muerto la
inocencia de nuestros niños. Sin duda, será un día feliz.


Ese mismo día canonizarán a San Michael, patrono de las
negras causas perdidas (y nuevo Santa Claus).