¿Cómo es?
Subido de tono, casi porno. Es el que invita al pecado de forma sutil pero agresiva. Si me entienden, ¿no?

¿Cuándo queda mejor?
En el inevitable juego de seducción. Es el piojito del cortejo, ese que te dice “¿Qué esperas, vaquero? El helado se derrite.”
Generalmente sólo pasa cuando las copas dictan en donde pasarás la noche, o en su defecto, en la trama de las películas del Golden.

¿Con quién lo aplicas?
Desconocidos/as generalmente. Con los que puedes tener una experiencia sin compromisos y fugaz. Nomás acuérdense que sin globos no hay fiesta.

Piojómetro
6
Aun cuando es una clara señal de que estás a nada de cumplir tu fantasía más oscura, le quita la esencia tierna y melosa al tema en cuestión.