Hay acciones por las que siempre serás recordado. Un comentario en un mal momento como el clásico que felicita a la gorda porque está embarazada y tómala no lo está. Una borrachera infame, una pregunta en clase del tipo "¿dónde está el clitoris?" y la que la pregunta es una mujer. Una mala película que recomendaste, un pésimo camino que elegiste cuando todos tus amigos te iban siguiendo o bombardear todo Europa. Son errores con los que tendrás que vivir.

De todos estos el que sobresale es el autogol. No me importa qué jugador seas, cada que hablen de ti recordarán ese autogol, sobretodo si es TAN estúpido como los que verán a continuación. No fue un mal pase, no fue un penal fallado o una expulsión porque le rompiste la rodilla a alguien. No no, lo que hiciste fue meter la pelota en tu propia portería traicionando por completo a tu pobre portero que te hubiera confiado su vida y a sus hijos.

Denle a siguiente para empezar a burlarse, al fin, es lo que mejor hacemos. Voy avisando que aunque está su foto, no está el de Verón en los Pumas porque en esta ocasión quiero que nos burlemos de extranjeros y no de nosotros.