Si eres del esos adictos a las emociones fuertes y sales del cine con la sensación de que ya nada te asusta, es hora de que pases al siguiente nivel: ¿qué tal un campamento en medio de la nada, donde se han registrado fenómenos paranormales, con sesiones de invocaciones espiritistas y un entorno completamente terrorífico?

Esto ocurre a las afueras de la Ciudad de México, en un lugar que se conoce como ‘La Zona del Miedo’. ¿Qué es lo que hace que se haya nombrado así a este paraje? Se dice que en este lugar se aparece el espíritu de una niña entre las 2 y las 4 de la madrugada. Algunos aseguran que fue asesinada, otros que se perdió en las inmediaciones y murió al no poder regresar a casa. A las 3 de la madrugada hay una sesión de invocación de espíritus para invocar al fantasma de la niña a la luz de las fogatas.

La ubicación exacta se la reservan los organizadores del evento, pero debes saber que es en Querétaro. Además, están tan seguros de que ocurren cosas extrañas en el lugar que te retan a llevar cámaras fotográficas y de video para documentar los sucesos que se dice ocurren en el lugar.

Ahora bien, debes saber que al ser una experiencia fuerte, hay algunos requisitos y restricciones que se deben cumplir, por seguridad y salud de los asistentes:

  • Sólo se aceptan mayores de 17 años.
  • Debes asistir en un grupo de entre 6 y 8 personas (esto es indispensable).
  • No se permite acceso a mujeres embarazadas ni a personas con problemas cardiacos.
  • Debes tener tu propia casa de campaña.

El costo de la experiencia es de 400 pesos por persona.

Para reservar tu lugar u obtener mayores informes de las fechas que hay disponibles, llama al 42 25 61 55 63 y al 4612 51 42 20.

>>También puedes checar su Facebook haciendo clic aquí

Tip: si no tienes suficientes amigos que sean adictos a las emociones fuertes como tú, entra a los comentarios de sus publicaciones y ahí hay personas que están buscando otros para completar sus grupos.

¿Jalas o te pandeas? Comparte esta nota con tus conocidos que saben que no le tienen miedo a nada.

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