Por fin pudimos entrar en los cubículos de Litchfield y ver qué sucede en la cuarta temporada, (tranquilos, no habrá spoilers si aún no la han visto). Así que esto es buen motivo para reconocer lo que esta serie nos ha enseñado.

Desde 2013, Orange is the New Black nos ha mostrado cómo se vive la desolación, la amargura, la tristeza y el dolor en una prisión de mínima seguridad, pero también nos ha hecho cómplices del amor, la pasión, los fajes y el sexo que se gesta en esas paredes amarillas.

Pero, ¿qué tan diferente puede ser de la vida real? ¿Qué hemos aprendido de nuestras queridas reclusas? Aquí hicimos un conteo:

1. Hay que bajarle de huevos

Sí, con esa expresión. Así como Piper hizo tiempo después de que llegó a Litchfield; como lo hizo Red cuando le quitaron la titularidad de su cocina. Podrás ser muy gallito, tener conocimientos, saber de qué lado masca la iguana, pero nunca deberás olvidar que la vida es una ruleta: a veces se está arriba y otra veces, abajo. Nadie tiene comprado el futuro.

2. Ante el dolor, la fantasía

Bueno, tampoco hay que llegar a los extremos de Nichols con sus fantasías patrocinadas por los psicotrópicos, pero ¿qué nos dicen sobre la gallina omnipresente? Uno podrá estar con el agua al cuello, pero siempre hay que encontrar la oportunidad para distraerse y enfocarse en otros asuntos menos importantes.

3. Siempre es bueno emprender

Con lo que tengas a la mano. Si andas práctica y textualmente en chones, ¿qué mejor que aprovecharlos y sacarles provecho? Piper lo hizo y convirtió el negocito en todo un emporio. Si la vida te da la espalda, agárrale una nalga.

4. No juzgues

Sólo la cuchara sabe lo que hay al fondo de la olla. ¿Red te parece demasiado dura? Lorna, ¿adorable? Pennsatucky, ¿psicótica?Mmm… probablemente, pero todo tiene su razón de ser. Cada una tiene una historia. La de Red, un tanto triste; la de Lorna, un tanto obsesiva y la de Pennsatucky, bastante sórdida gracias a la canija madre que le tocó. Lo que nos enseña que uno no se puede ir como hilo de media barata al juzgar a alguien.

5. Convierte a tus amigos en tu familia

Las condiciones de la prisión son terribles, (¿te recuerda en algo tu trabajo?). Por ello, lo mejor es buscar aliados, rodearte de gente que comparta tus ideales. Así como lo hizo el grupo de Taystee, el de Gloria o la familia (y red de contrabando) que crea Red con sus amigas. Atrévete a meterte con alguna de ellas y tu futuro estará en una trituradora de carne.

6. Siempre hay alguien peor que tú

Aquí no aplica el dicho: mal de muchos, consuelo de tontos. En realidad, el mal de uno solo es mi mejor consuelo. Si no lo crees, piensa nada más en todas las veces que mandaron a las reclusas al área de aislamiento.

7. Aprende a ganarte a la gente

Porque siempre es bueno darles baje con algo. Dayanara hizo todo lo posible por ganarse (y cenarse) a Pornstache una vez que se embarazó de Bennett. La reacción de Méndez es inesperada y hace todo por cuidar de la chamaca que viene en camino. ¿No que no tronabas, pistolita?

8. Nunca, NUNCA pases por encima de tus principios

Así como lo hizo Taystee al seguirle el cuento a Vee y dejar de llevarse con Poussey. Para evitar esto, lo mejor es siempre respetar el punto cinco.

9. Es real: el amor puede estar en el aire

Bah, nadie mejor para explicar esto que Piper y Vause o que Lorna y Nichols (antes de que Lorna se casara con Muccio). ¿Quién dijo que un buen orgasmo no se puede conseguir en cualquier circunstancia?

10. No hay motivo por el cual no debas arreglarte

Sophia es la mejor representación de ello. Guapa, femenina y siempre arreglada. Le siguen Lorna, Red, Vause o Maritza. Podrás estar muerta por dentro, pero de pie (peinada y maquillada) como un árbol.

11. No confíes de más

Pennsatucky nos podría dar cátedra al respecto. ¿Por qué diablos confiar en un guardia que la hiciera humillarse? Ni hablemos de Crazy Eyes, quien confió ciegamente en Vee para hacerse de un lugar en la prisión. La gente siempre jalará agua para su molino.

12. La vida te cobra caro los errores

Como pasó con Nichols al involucrarse con Luschek. ¿Qué tanto es tantito? ¿Qué más puede pasar si la riego un poco? Mucho y lo mejor es evitarse más problemas.

13. A veces una mentira te puede salvar

Álex dijo que nunca delataría a Piper, pero no cumplió su palabra. Finalmente probó la libertad al delatarla para poder salir de la prisión. Claro, el karma se la cobró caro y su vida fuera de Litchfield se convirtió en un verdadero infierno. Una mentirilla podría hacer que regrese a ti todo lo que alguna vez soñaste, aunque nunca podrás estar seguro de las consecuencias.

14. La gente traiciona

Bennett parecía estar muy enamorado de Daya. Finalmente se pintó de colores sin que se volviera a saber nada de él. ¿Crees que el amor puede salvarte? Par favar, la sección de cuentos infantiles está en otra página.

15. Hasta los corazones más puros se dan por vencidos

Como cuando Poussey o Crazy Eyes cayeron en las redes de Vee. Es difícil mantener la bandera en alto en situaciones extremas. Evitar darse por vencido cuando el mundo se cae por partes puede resultar una tarea imposible.

¿Qué otras cosas han aprendido al acompañar a las reclusas en su vida dentro de la prisión?

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