Los alumnos de esta escuela son privilegiados: además de contar con numerosos patios y canchas de básquet tienen una pista de atletismo de tartán, cancha de futbol, gimnasio, alberca semiolímpica, así como chapoteadero y un minizoológico para los más chiquitos. También son afortunados porque así como se les exige en el ámbito académico (tienen pase automático a universidades como la Ibero, el ITAM o el Tec) cuentan con el colegio para salir adelante; es decir, si un niño anda bajo en calificaciones, los profesores hablan con la familia para nivelarlo por las tardes y si acepta, los gastos y la tutoría corren por cuenta de la escuela. Y contrario a lo que cualquiera pensaría, este no es un colegio en el que uno deba empezar desde maternal por el idioma, al igual que con las calificaciones, entrarían a nivelación para ponerlos al corriente. Tiene un área japonesa —sus graduados de secundaria deben revalidar materias para entrar a prepa— y una mexicana, bilingüe en inglés, pero fomenta la interacción: para que sus alumnos conozcan ambas culturas hay intercambios de fin de semana donde los niños de la sección mexicana visitan una casa japonesa y viceversa. Aquí, el respeto, el orden y la autodisciplina son máximas.

Horario:7h00 a 14h45