Etgar Keret es heredero de escritores como Franz Kafka y Nikolái Gógol. Escribe “flash fiction”: historias de mil palabras o menos. Sus cuentos combinan el realismo social con la fantasía. Además, tiene la cualidad de no perder el sentido del humor, incluso si sus personajes están frente a la peor de las situaciones.

Keret nació en Ramat Gan, Israel (donde se ubican la mayoría de sus historias). El escritor también esensayista (tiene una visión muy particular del Israel contemporáneo en el que vive y desde el cual escribe), guionista de televisión y director de cine; en 2009 ganó una palma de oro en Cannes por la película “Medusa”, que codirigió con su esposa Shira Geffen.

En México lo conocimos por ahí del 2006, gracias a la traducción de “Unhombre sin cabeza”. Pero fue hasta el año pasado, en su segunda visita a nuestro país, cuando comenzó la sensación. ¿Por qué tanto alboroto por los cuentos de este escritor israelí? Para empezar, cada uno de sus relatos está sumergido en un bizarro realismo mágico situado en Israel. Keret se las arregla para hacer que un escenario habitual se vuelva insólito, sin extenderse más allá de 4 páginas. Sus tramas van de lo lúdico a lo oscuro y de lo trivial a lo existencial.

Los personajes de Keret siempre están desesperados y llenos de compasión por sí mismos. Su sacudida emocional es contundente y directamente proporcional a la capacidad de síntesis lograda en cada ficción.

En De repente un toquido en la puerta” cada cuento hace que la vida cotidiana explote y con ella, la comida rápida, los empleos sin futuro y las mentiras infantiles. Este libro incluye un pez que habla, dilemas poco explorados, y la incomodidad frente al otro que “no soy yo”.

En sus pequeñas historias aparece una constante: una realidad a veces anárquica; otras aterradora y, en general, irracional.

Keret narra en primera persona, como alguien que naturalmente expone delirios. A pesar de la rareza en su literatura, los personajes se vuelven universales: no importa si lo lees en México, Francia o Israel.

Micronarrativa para tiempos modernos que puede ser leída en minutos; en el transporte público, en cualquier sala de espera, incluso si sales a fumar.

Etgar Keret escribe cuando puede (por eso se tardó con este libro) y el lector se acerca a él en forma inevitable. Sus fábulas generan ansiedad, pero aún con ese riesgo seguimos leyendo. Sabemos que a pesar de su corta duración, las consecuencias de unas cuantas páginas de lectura rápida serán a largo plazo.

57891Mini cuentos

Mini cuentos (A.G)

Etgar Keret
De repente un toquido en la puerta

México, Editorial Sexto Piso, 2012.
$249.00