Por: piko / buenavida.mx

Aunque los vinos de los que más se habla casi siempre son los caros y de renombre hay pequeñas joyas de menos de $200 con las cuales jamás quedas mal; buenas para llevarlas a una cena o probándolas en tu casa con tus cuates.

Estos vinos están hechos para tomarse pronto, no tienen pretensión alguna de ser los mejores vinos del mundo –ni del país- y cumplen con ofrecer algo bien hecho, con sabor y aroma agradable y lo más importante, sin defectos.

En México, en general, solo las bodegas grandes como L.A. Cetto (con su línea básica y reserva), Bodegas de Santo Tomas (con la línea de varietales y ST) y Casa Madero (con la línea San Lorenzo y Monte Viña) tiene vinos por debajo de los 200 pesos, aunque poco a poco aparecen más propuestas en los anaqueles, de pequeños productores, dentro de este rango de precio. La única mala noticia es que no es muy fácil encontrarlos, gracias a los amados impuestos de nuestro país (no me hagan mucho caso, pero entre el 45% y el 50% del precio del vino mexicano son impuestos).

Hablando de vinos del resto del mundo existen en el mercado muchísimas propuestas de menos de $200. Muchos son vinos súper cumplidores. En este rango de precio es donde existen muchos grandes productores alrededor del mundo con diferentes líneas que buscan atacar el mercado del vino “de diario” o “de batalla” que se encuentra entre los $70 y los $200 (nunca tomen un vino que cueste menos de $70 en México, por favor). Aquí están todos los vinos comerciables, exportables y para algunos, controversiales debido a que se realizan en grandísimo volumen.

Es importante destacar que gracias a estos vinos de producción masiva y precios “bajos”, la industria tiene posibilidades de crecer y generar por otro lado vinos “premium”, más caritos, con mucha más dedicación y refinación en su proceso.

Así que para empezar el año sin dinero pero con buenos vinos, nos vamos con las recomendaciones que mañana podrían ir a comprar a casi cualquier lado.