¿Cuántas veces
nos hemos visto abrumados por tantas exquisitas opciones en la carta? Después
de revisar el menú se antojan -bajita la mano- dos o tres platillos distintos.
Nadie ha estado exento tampoco de haber discutido con el acompañante en turno
por saber a dónde se va a ir a comer, o cuál es el antojo que predomina
(hamburguesas o tacos, dulce o salado, picoso, caldoso, macizo, ligero,
pegador…). Para esos momentos de agonizante indecisión en donde la saliva ya
invade esa resbaladilla que va desde los oídos y cruza la quijada advirtiendo
que hay que comer (¡pero ya!), los glotones indecisos y antojadizos de Chilango
lanzamos esta propuesta que enriquece la gastronomía mexicana…a nuestro modo.

Le hemos llamado
Metacomida y es algo así como el platillo más rico relleno del segundo más
rico.
Algunos nacieron en las cocinas de los más ingeniosos tragones, otros
provienen del criterio de los genios que atienden los puestos urbanos, otros
llevan años de tradición. Como quiera que sea, la propuesta es seguir
inventando, perderle el miedo a la combinación de sabores y texturas (por más
contrastantes y excéntricas que parezcan) y llenar nuestros estómagos hasta el
punto de olvidar de por vida el famoso "hubiera pedido el otro" o "se ve más
rico lo tuyo". Glotones del mundo, aquí nuestras propuestas.