Un lugar para adentrarse en la gastronomía polaca-húngara y, en general, de Europa del Este. El restaurante se ubica en la Condesa desde 1993, y el platillo por el que todo mundo regresa es el pato relleno de manzanas agrias, hay quienes opinan que es el mejor de la ciudad. Pero para que te des una idea del menú, para comenzar, de cortesía te sirven una empanadita de papa y cebolla, y luego puedes pedir un arenque con crema agria, cebolla y manzana, para después disfrutar el pato o una carne tártara o un gulasz (finos trozos de ternera en salsa de paprika) y concluir con un delicioso postre, como la crema de queso con salsa de blueberry.

Entre las bebidas para acompañar los alimentos está el Zubrowka (el aperitivo de la casa), el cual sirven súper frío y a tope, además de whiskies, rones, tequilas y una carta de vinos con alrededor de 50 etiquetas nacionales e internacionales. La atención, por otro lado, es excelente. La decoración de Specia es art dèco, la música ambiental es europea y a este restaurante acuden la crema y nata de políticos, artistas, gente de negocios y de la zona. Aunque su costo no es barato, dale una oportunidad a la cocina polaca, seguro te llevarás una grata sorpresa.

También recomendamos: El Greco y Fritz