Puerto Madero

REVISIÓN GENERAL
Atención
Calidad
Ambiente

Masaryk 110

Entre Schiller y Petrarca

Col. Polanco Chapultepec

Tel. 5545-6098

Horarios:
Lun-Dom 13-1 Hrs
Precios: $ 600 - $ 700
Formas de Pago:
TC: Todas
Efectivo
Sitio Web
Generos : Argentina
Servicios: Reservación requerida, Abierto en Domingo, Valet parking, Área para fumar, Terraza

Puerto Madero se lena de lo lindo, por lo que es necesario reservar para asegurar una mesa. El lugar es enorme: tiene dos pisos y la decoración intenta, sin mucho éxito, reproducir los edificios de ladrillo de Puerto Madero, en Buenos Aires, en una versión moderna. Pero le falta encanto, quizás por las proporciones tan grandes del lugar. Las lámparas naranjas no logran dar la calidez necesaria. Además, cada silla está cubierta con una tela que lleva la publicidad de un vino argentino: fuera de lugar, considerando la carta y los precios que manejan.


En ambos pisos hay un bar moderno e iluminado que sobresale en este ambiente oscuro. Los meseros, con sus corbatas naranjas y negras con el logo de Puerto Madero arriba (un detalle muy kitsch en un lugar de esta clase) siempre están tan atentos que da la sensación de que están en un concurso de rapidez.

Cuenta con platillos típicos como empanadas, carnes como bife de chorizo, asado de tira, vacío, pastas, pizzetas, sopas y ensaldas; es un lugar cotorro y la comida es buena.

Las empanadas se piden a la pieza y son enormes. La pasta de hojaldre es fina y el relleno de carne picante está muy bien sazonado: fuerte y jugoso a la vez.

La ensalada de cangrejo viene con una capa demasiado gruesa de mayonesa que puede ser desagradable, pero una vez que se la quitas el cangrejo tiene un aroma a alcaparras, perejil y aguacate que puede ser una lástima para los puristas del cangrejo, ya que le quita la pureza de su sabor. La tártara de salmón es una delicia: el salmón lo marinan con salsa de soya y cebollín, lo que le da un sabor fresco destacado por ciertos ingredientes gustosos en el paladar.

El bife de chorizo es de muy buena calidad: la carne está suave y cocida en su punto, y las papas soufflés vienen en una canasta hechas también de papa, al igual que en Cambalache. Están bien hechas, ligeras y no grasosas.

También tiene una buena selección de postres, desde el clásico alfajor, crujiente y con una buena cantidad de dulce de leche, al Chocolatísimo Puerto Madero, un soufflé de chocolate caliente en salsa de café a la moda que se derrite en tu boca.

En este restaurante desde el dueño —quien cuando aparece por el lugar está siempre pendiente de los comensales— hasta los meseros son argentinos. El servicio es cálido y amable, aunque si vas en fin de semana puede ser algo lento ya que el lugar estará lleno, el ambiente y la concurrencia son divertidos. El volumen de la música de fondo es un poco elevado, aunque te permite una conversación amena.

Sin duda comerás muy bien en Puerto Madero, sin embargo, es caro y esos precios no se justifican tomando en cuenta la sencillez de los platillos. Otros restaurantes argentinos, como Cambalache o El Rincón Argentino, ofrecen la misma calidad a un mejor precio.