Nonna significa abuela en italiano. El restaurante busca recrear la esencia de la casa de la nonna, y lo logra en todo: en su comida tradicional italiana, que ofrece ese sabor hogareño y que sin ser pretencioso se encuentra elaborado al punto.

El Duo di mare son pequeños cubos de tártara de salmón y atún acompañados de un aderezo de citroneta, el sabor a mar del pescado, la acidez del aderezo, y un ligero sabor a poro se balancean a la perfección y la ración es exacta para pedir un segundo tiempo.

Las pastas del Nonna  son especialmente buenas, pues no es fácil encontrar lugares en los que la pasta esté en su punto ideal de cocción, aquí se logra; las pastas traen ingredientes de altísima calidad y en cantidades generosas, como se aprecia en el Linguine Capricciosa que trae alcachofas espárragos y zetas, o en el fetuccini al salmón, que trae una deliciosa combinación de salmón ahumado ajo y piñones.

Recomendamos pedir la pasta para compartír, pues las raciones son abundantes y sería una pena quedarse sin espacio para pedir un plato fuerte, de los cuales recomendamos muy ampliamente la Anitra al fruti di bosco, que es pato marinado en salsa de frutas rojas acompañado de puré de papa con manzana. El pato es de sabor fuerte y suele ser muy seco, la salsa de frutas rojas le da la humedad perfecta, mientras que la suavidad del puré contrarresta lo agarroso del pato, dejándonos sólo con lo mejor de su sabor en el paladar.

Otro plato que no se puede dejar de lado es el Pollastrello (el consentido del chef) la piel uniformemente dorada nos deja ver antes de probar el platillo el tiempo que se le ha dedicado, y al partirlo el aroma nos deja probarlo antes de introducirlo a nuestra boca, este platillo tiene todo el sabor concentrado de algo que se ha preparado con la paciencia y dedicación de una abuela, muy suave y sutil, si no fuese porque el estómago tiene un límite, uno podría comerlo y comerlo sin saturarse del sabor.

Para cerrar con broche de oro y desabroche de pantalón, es necesario un postre, y nada mejor que el Corazón de chocolate, una bomba de chocolate acompañada de helado de menta.

El Nonna además de ofrecer a sus comensales la comodidad relajación y sabor característicos de la casa de la abuela, nos sorprenden con un plus de innovación y vanguardia: el diseño del lugar se basa en materiales tradicionales como piedra, madera y ladrillo que se reinventan, resultando en una ambientación que es calida, sutil, rústica y espectacular a la vez, como se puede apreciar en la pared de fondo, que sin ser extravagante tiene un ligero efecto de caleidoscopio, en las noches se prende una luz amarillosa y baja hace el lugar ideal para una cena romántica.

El restaurante se encuentra totalmente abierto, y con vista a Amsterdam, una de las calles más características de la colonia Condesa, si vas caminando por ésta calle te sentiras invitado a entrar y quedarte por horas. Además tiene una barra que separa la calle del interior del restaurante, así que si vas caminando por allí y simplemente deseas tomar una copa puedes hacerlo.

Cada detalle está pensado y cuidado a la perfección; desde los menús que figuran a un álbum fotográfico antiguo, hasta lo más básico: la inmejorable comida tradicionalmente italiana, cuyas raciones, sabores y texturas se encuentran en el punto justo de la perfección.