Escondido en la Roma está lo que muchos conocen como el rincón parisino de México. Céline Perrot y Clement Nowark, un matrimonio francés, llegó al país con el deseo de abrir un restaurante. La Vie en Rose, llamado así en honor a la canción de Edith Piaf, es un lugar de comida gala tradicional. La pareja se encargó de que todos los detalles transmitieran su cultura. Desde que uno entra, la música y la decoración transportan a una antigua casa francesa.

Cada receta representa el sabor de la cocina casera de Francia. Es por eso que el chef utiliza únicamente productos franceses, el pan por ejemplo es de la pastelería La Bohéme. La carta cambia según la temporada pero siempre encuentras algunos platillos de cajón.  La sopa de cebolla es uno de ellos, va gratinada con queso emmental y es perfecta para abrir el apetito.

Por otro lado, si nunca has comido boeuf bourguignon, te recomendamos hacerlo. El plato es único porque la carne se cuece durante 10 horas en vino tinto. De postre, el Café Gourmand es imperdible, te da una probadita de todo ya que es cuatro en uno: café americano acompañado de tres miniporciones dulces (chocolate, créme brulée y frutos rojos).

Para ver la vida en rosa, tienen un menú de cócteles, cada uno lleva el nombre de una estación del metro de París. Hay uno llamado Ópera que está hecho con vodka, hierbabuena, limón y un poco de azúcar molida. Otro dato interesante es que el restaurante tiene noches de jazz todos los jueves. El ambiente se presta para que vayas a disfrutar de la música y de los diferentes drinks.

La decoración estilo art déco en un espacio subterráneo le da el toque especial. Al entrar sientes una atmósfera cálida que da la oportunidad de pláticas íntimas entre amigos o en pareja. Sus dueños son el corazón del lugar, en todo momento están al pendientes de que no te falte nada. Si estás planeando una cita este sitio es la recreación literal de la ciudad más romántica del mundo.