Cuando los yucatecos extrañan el terruño van a este restaurante porque sus platillos son muy apegados a las recetas originales de su lugar de origen. Tanto que es uno de los pocos sitios en la Ciudad de México donde en octubre se puede consumir el Mucbilpollo, una especie de tamal envuelto en hojas de plátano con pimiento, salsa de tomate y carne de pollo y puerco.

Otros platillos estrella son la cochinita pibil y el lechón al horno que bien se pueden maridar con alguna de las cervezas artesanales yucatecas, como Ceiba o Patito. Muchos de los ingredientes que utilizan en su cocina provienen directamente de Yucatán, en especial las especias, las pastas y el queso holandés.

Hanal K’U significa manjar de dios en lengua maya y la intención de este restaurante es integrar gastronomía, cultura e historia en su concepto. Se ubica en una casona de los años 40, con acabados afrancesados. Su escalera circular pegada a la pared llama la atención.

También tienen un piano que de jueves a domingo suena con música yucateca, boleros, baladas y otros géneros pop. Ya tienen 14 años funcionando y si continúan así seguro cumplirán muchos más.