Este lugar comenzó en 1999 como un puesto callejero en la colonia Tabacalera y hoy es considerado uno de los mejores restaurantes de comida argentina en la ciudad. Entre cortes a la parrilla, pastas, papas rellenas, lasagnas, agnolotis y empanadas, el menú de este lugar es muy boludo.

Para abrir el apetito, se debe ordenar alguna de sus empanadas. La masa la hacen diariamente en el lugar sin conservadores y tienen rellenos como la clásica de carne molida de res, con especias argentinas y pasas maceradas.

De sus cortes a la parrilla hay que pedir el medallón de filete mignon bañado con salsa de roquefort y acompañado con higo caramelizado, flor de calabaza y betabel. Pero si llevas más hambre que otra cosa pide el asado de tira: un gran hueso con pedazos de carne suave y jugosita con el que hasta Pedro Picapiedra gritaría ¡Yabadabadú! (o en argentino: shabadabadú).

Y como siempre hay espacio para lo dulce, no hay que perderse el postre italiano de La Nonna (llamado así en honor a la abuela de la dueña), que es una tartaleta de mascarpone hecha en casa con mousse de limón, almendras tostadas, caramelo y confit de naranja.

Es muy común toparte con Viviana, la dueña del lugar, quien te hará sentir como en casa. Tanto, que en una de esas hasta te llevas un abrazo con su “vuelve pronto”.