Tacos ampliamente recomendables. Carta surtida: desde deliciosos alambres, cortes de carne y puntas de filete hasta cecina, sopas y quesos fundidos.

Diversas salsas picantes al centro de la mesa nos invitan a probarlas en diferentes combinaciones. Indispensable probar la famosa campechana. Otras especialidades guiñan el ojito como los tacos de pollo adobado y costilla de roast beef.

Pero el rey es el pastor. Su sazón es único: la carne tiene un color anaranjado más obscuro que los habituales. En El Huequito no se agrega la característica piña. Ver para creer, y sobre todo saborear, haga la prueba.

Su primer sucursal fue la de Ayuntamiento 21, en el Centro Histórico y que aún da servicio. Literal inició en un huequito que se formaba al exterior de la vinatería La Europea, en 1959.

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