En el restaurante Don Carlos se respiran los aromas de la gastronomía 100% regional y se aprecian los sonidos de la música tradicional. Para esos que tienen grabado México en el corazón, no existe mejor lugar para deleitarse con lo mejor del país y hasta para echarse uno que otro partido de la selección.

Llevan atendiendo desde 1950, en sus amplias instalaciones con ese acogedor estilo de las cocinas regionales mexicanas: manteles de colores brillantes, banderas de México y vajilla de talavera. Se trata de un espacio que desborda aromas, sabores y colores, que contribuyen a darte toda una experiencia gastronómica.

¿Eres de esos que le entran rico a la comida? Entonces, Don Carlos está listo para llenarte con sus deliciosos platillos a la carta o con su amplio buffet. Si ya andas por ahí, no dejes de probar la sopa de médula que ha recibido numerosos reconocimientos, dicen que la receta secreta nunca ha sido igualada.

Otras recomendaciones son la crema de frijolito maya y la parrillada mixta con todo y anafre, pá que no se te enfrie mientras echas la plática.

El lugar nos engancha con la comida pero también con el entretenimiento. Puedes darle a la cantada de tu canción favorita con el mariachi  o carcajearte un rato con el simpático payaso Silbatito.

La infalible ecuación de comida deliciosa, ambiente familiar, música en vivo y excelente servicio, ha atrapado los corazones -y los estómagos- de muchos chilangos y seguro contigo hará lo mismo.