En Argentina, “cheto” es un término que se puede utilizar para hablar de dos cosas distintas: algo que está chido o cool, o alguien que responde a la descripción de lo que aquí llamamos mirrey. De acuerdo con Luis Durán, uno de los socios de este restaurante, con este nombre simplemente intentan transmitir la idea de algo divertido, y, que hiciera alusión a su origen argentino.

¿Qué vas a encontrar en este sitio? Básicamente, tacos… pero no como los podrías encontrar prácticamente en cada esquina de esta ciudad, sino tacos que fusionen los sabores característicos de la comida mexicana con los de la argentina.

¿Quieres más detalles? La oferta se compone de más o menos 20 tacos, en los que encontrarás una interesante mezcla de ingredientes, como tortillas con chimichurri, camarones empanizados con mole negro o arrachera con queso de cabra. ¿Te parece un disparate? ¡Qué bien!, de eso se trata. Al menos eso parece, si partimos de que al propio Luis le gusta definir sus tacos como “atrevidos”.

La opción para vegetarianos se llama “hijo del faraón”. Se trata de un taco con un envoltorio de hoja santa rellena de quesillo, queso de cabra y puré de papa, con una embarradita de frijoles negros y una salsa de chile pasilla tatemado que le da el toque picante que necesita.

Y para rematar: llévate a casa un dulce sabor en la boca propinado por una empanada que puede ser de dulce de leche, manzana caramelizada o chocolate Ferrero Rocher, entre otras opciones. ¡A taquear!