El secreto del Café Darío Escandón está en que la dueña prepara personalmente el pan que se vende, las galletas e incluso el pan de los sándwiches. La atención es muy atenta y la comida deliciosa.

Por la mañana, te recomendamos desayunar unos molletes o los huevos rancheros en salsa roja, una combinación de chiles e ingredientes de la casa de muy buen sabor. Para beber, hay diferentes tipos de café, sodas italianas, frappés y jugos. El café que manejan es cien por ciento mexicano y lo compran con pequeños productores de Guerrero y Oaxaca. Esa combinación de granos sólo la puedes tomar en este lugar dentro de la Ciudad de México.

En la tarde, lo más solicitado son las ensaladas, para que te des una idea del porqué te damos dos ejemplos: la ensalada Darío, que lleva jitomate, aceitunas negras, queso de cabra, cacahuate y ajonjolí tostados, aceite de olivo, pollo o atún; y la ensalada Carlota, con queso feta, arándanos, durazno, semillas de girasol y aderezo de coco dulce. Todas las ensaladas llevan lechuga italiana y lechuga romana hidropónica.

Los sándwiches también son muy buenos y los preparan con distintos tipos de panes, entre ellos artesanal, bagels y chapatas. El rústico está elaborado con pan artesanal de semillas y fruta deshidratada, y lleva queso gouda, jamón de pavo, jalea de arándano y un toque de mostaza. El italiano es pan de centeno con ciruela, y lleva queso provolone y salami. De postre, tienen un excelente surtido de galletas, que hornean todos los días. De hecho puedes seguir el olor por la calle de Sindicalismo y llegar a Café Darío.

Mucha gente visita este lugar por el chai, y es que ellos mismos lo preparan con especias recién molidas. Otra bebida que debes probar aquí son los moleculares, sin lácteos ni cafeína, están hechos a base de té blanco y jaleas de sabores: lichi, mango y maracuyá. De ahí, que no solo llegan los oficinistas y vecinos de la zona, sino quienes se han enterado de la frescura y buena calidad de los productos que aquí venden. El lugar se llena (sólo hay ocho mesas para cuatro personas) y hay que ser pacientes, porque todo lo preparan en el momento, pero aún así el servicio es bastante eficiente.