Opción A: Pepino con tampico reloaded.

Necesitan:
– 1 pepino (de cada pepino saldrán aprox 15 rodajas)
– 1 bote de tampico preparado

Instrucciones:
1 . Aquí depende de gustos, (a mi la cáscara del pepino, lejos de disgustarme me gusta) pero pueden pelar los pepinos si les parece adecuado.
2 . Cortar un extremo del pepino hasta que el centro sea accesible con una cuchara o cuchillo largo. Vaciar el centro del pepino. (Si lo hacen con un cuchillo, que sea de punta redonda para que no se vaya a maltratar el pepino más de lo necesario)
3 . Retacar el hueco del pepino con tampico. Siempre que piensen que no cabe más, aplasten bien hacia el fondo e intenten poner un poco más.
4 . Refrigerar mínimo 2 horas.
5 . Rebanar el pepino en rodajas de poco más de medio centímetro justo antes de servir. (Si las hacen muy delgadas no lograrán el efecto sushi, y mientras más gruesas sean sus rebanadas, más pro se verá).

¿Por qué hacerlo?
Es a prueba de todos los gustos porque justo elimina el elemento de las semillas del pepino que a mucha gente no les parece agradable, además se ve super profesional y requiere el mínimo esfuerzo.

Opción B: Queso con orégano

Necesitan:

– 1 buen queso panela. Entero, por supuesto.
– Orégano.
– Ajo en láminas.
– Aceite de oliva
– Galletitas saladas de su preferencia.

Instrucciones:
1. Hacer cuatro aperturas en la superficie del queso que no lleguen hasta el borde. Colocar una lámina de ajo en cada apertura.
2. Agregar aceite de oliva por toda la superficie, asegurando que entre en las aperturas.
3. Agregar sal y pimienta y espolvorear con orégano.
4 . Refrigerar mínimo 2 horas para que se absorban todos los sabores.
5 . Hornear de 8 a 10 minutos a 180 grados antes de servir.
6 . Servir tibio con galletas (si quieren montar las galletas antes de servir está bien, o cada invitado puede servirse si presentan el queso completo).

¿Por qué hacerlo?
Porque resulta en una botana que aunque muy simple, siempre será mejor recibido que las papas y los sabritones, además de contar como bajo en calorías.