En temporada de calor siempre se agradece una terraza. Y si viene acompañada de tepaches helados, tostadas para todos los gustos y música, mucho mejor. Algo así ocurre en Moxie, una propuesta en las alturas de la esquina que forman la Avenida Michoacán con la calle Tamaulipas. Un lugar en donde la gozadera no es promesa, sino garantía.

A este sitios vas a pasarla bien. De entrada, tienes que saber que su tepache es completamente artesanal. Puedes elegir entre la versión normal, o la que lleva un leve “piquete mezcalero”, y de cualquier forma saldrás feliz. Ya sea que el chorrito de alcohol añadido haga lo suyo o no, la presentación está coqueta y querrás un segundo (o tercer) vaso.

Tepache bien frío de Moxie

Foto: Moxie

Su carta de comida es un regreso a los productos del mar y a antojitos mexicanos (como tacos, tamales y sopes) con toques de Oaxaca y Yucatán. No puedes perderte el pulpo a las brasas, que es un must del lugar y está tan bien presentado, que no querrás hincarle el tenedor tan rápido. Si no andas tan sofisticado, la ensalada Moxie, la torta de cochinita pibil y las enchiladas de pato con mole negro, también son recomendables.

No obstante, las tostadas son las reinas de la casa. No son tan grandes y (¡gracias al cielo!) no se deshacen a los dos minutos de que te las llevan a la mesa. Te recomendamos que para el antojo pidas la de tinga de setas, y si tu estómago tiene intenciones más serias, ordena la de pastor de pollo o salpicón de res.

Nada dice verano como un pulpo a las brasas

Foto: Ollin Velasco

En este restobar debes irte con calma, porque si te llenas demasiado rápido no llegarás al postre, y vaya que hay uno que merece la pena ser descubierto. Se trata del flotante Moxie, un par de vasos hechos de chocolate belga (completamente comestibles), llenos de cerveza artesanal stout, helado de vainilla y frutos rojos.

Por si ocupas, en Moxie son especialistas en mezcales artesanales. Así que si quieres pregunta por Gerardo (su amable gerente) y déjate llevar por las recomendaciones. Con veladora en mano, disfruta de las piezas de arte gráfico que exhiben periódicamente en sus muros.

¿Dónde?