Deentre los cientos de cremas y sopas que existen en el mundo, las favoritas, también consideradas clásicas, tienen dos cosas en común: una textura contundentey un sabor franco.

Sopas y cremas se derivan de un inicio humilde, campesinos europeosguisaban cuanto ingrediente tuvieran a mano para sacar todos los nutrientesposibles; el resultado se convirtió, a través deltiempo, en un obligado de los restaurantes. Ese tono directo y reconfortanteque tiene la sopa lo entendemos en nuestra cultura como un inicio paraabrir paladar. Algunasde estas preparaciones han adquirido fama mundial, se han convertido enfavoritos e,inalteradas,se repiten en el planeta.