Con ustedes los platillos que son a pulso una oda a la gordura

De qué va el combo

Es una combinación de masa más migajón. Sólo se toma un bolillo, se parte a la mitad y se le sambute un tamal (de dulce, de rajas, de mole o de verde, llévele, llévele), mientras mejor sea el tamal, mejor será la guajolota.

Para rematar, hay que agregarle un atolito y mira tendrás estómago lleno y corazón contento durante toooodo el día.

Sería más engordador sí:

Aceptarás agregarle al combo un tamal frito, sí, fríto, pa’ que la grasita amarre.