Su nombre es una astuta estrategia para hacerte asociarlo
con el Tin-Larín
, por lo que si nunca lo has probado pensarás que saben igual.
¡Pero no! El Bocadín es aguado, desabrido, y sin importar su frescura siempre
sabrá a viejo. Los Tin-Larínes son ricos y baratos, sin duda alguna la mejor
opción para piñatas.