El equivalente a un Champagne en Italia es el Prosecco, que al igual que la champaña se puede encontrar desde muy seco, como éste, hasta muy dulce.

Éste vino espumoso de Italia huele principalmente a pan horneándose; también tiene aromas de manzana y naranja. En la boca reafirma los olores, sabe un poco como a pan, y recuerda a un tehuacán con mucho limón, pero acompañado de un saborcito dulce rico.

Es un espumoso muy fácil de tomar, no cuesta trabajo, gusta casi a todos y se recomienda para los que apenas se van iniciando en esto de los vinos.

Lo puedes comprar por $210 en La Europea.