Es una costumbre muy japonesa pedir un caldo hirviente y en la mesa agregar un huevo al plato. Observa como comienza a cocinarse mientras das los primeros sorbos. Para hacerlo con toda libertad sin que tus vecinos de mesa te vean con cierto asco, ve a Nagaoka, uno de los templos nipones más auténticos.

Para llegar, checa los datos acá.