¡Aguaceros primaverales!

Vas por la calle –caminando o manejando–, el sol brilla, no hay tráfico y todo parece felicidad. De pronto, el cielo comienza a oscurecerse y en menos de lo que puedes terminar de decir "parece que va a llover..." comienza a caer tanta agua que hasta temes encogerte... Pensando en ello, enlistamos algunos consejos que te ayudarán a salir bien librado en caso de que se presente otro "pequeño aguacero" como el ocurrido este fin de semana.

Vas felizmente caminado por la calle y sientes una gota, luego otra. Empezó a llover. Lo que hace cinco minutos era acera ha sido tragada por una laguna de tono café parduzco. Para resguardarte, no queda más remedio que atravesar ese recién creado ecosistema.

Si no te queda de otra más que seguir caminando y pasar por el charco, lo primero que debes hacer es cuidar el lugar que estás pisando; hazloarrastrando los pies lentamente. No muevas uno sin que el otro esté bien plantado: la presión del agua puede botar las tapas de las coladeras, y si no te fijaspodrías caer en una.

No pases corriendo con la intención de que tus pies toquen lo menos posible el aguasucia, lo más seguro es que resbales y entonces tus pies no serán lo único que la toque. Lo sentimos pero no, lo que ves nadando enesa laguna no es una nueva especie de nutria defeña surgida por generación espontánea, son ratas (o algo peor).

Sales en bermudas y sandalias a disfrutar el sol del mediodía, de pronto gotas, muy gruesas. ¡Hello! El calentamiento global ha desordenado los veranos y te toca sufrir las consecuencias del atrevimiento de sentirte guardián de la bahía. Ah, y aguas con el granizo.

En esta temporada debes cargar con un paraguas o cuando menos con un suéter. Si ignoraste esto y saliste a veranear, busca resguardo bajo la puerta de algún edificio. Puede que cuando termine de llover vuelva a salir el sol, entonces disfruta el arcoiris, los charcos y hasta el granizo, ¿qué tal unmuñecode hielo?

Usar ropa de playa en temporada de lluvia. Por favor, estamos a más de dos mil metros sobre el nivel del mar.

Situación
La falta de cultura cívica ha convertido a algunos mexicanos en unos changos que tiran la basura en donde sea, justo como cuando los changos pelan su banana y dejan la cáscara abandonada; ello provoca que se tapen las coladeras y que el agua se quede estancada en plena calle. Y si se inunda, el DF se convierte en un río con todo y rápidos que cualquier kayakista extremo quisierarecorrer.

Resguárdate de la lluvia subiendo a lugares altos de la calle, para evitar entrar en contacto con la basura...

Tirar basura en la calle. A ver, otra vez: no tirar basura en la calle.

Vas en el metro y empiezas a escuchar que afuera está cayendo tremendo chaparrón. Ah, no importa, dices, estás resguardado. Pero, ¡ja!, en algún momento tendrás que salir, ¿no? (aunque estés casi secuestrado por los vagones que se detienen horas en cada estación).

Tómalo con filosofía, espera hasta que acabe la lluvia, pero no te amontones en las salidas porque esas situaciones son ideales para los carteristas. Te puedes comprar una capita de plástico de esas que cuestan cinco pesos y echarte a correr en plena lluvia hasta llegar a tu destino final; al llegar, si es que no te caíste y tuviste que hacer escala en el hospital, no olvides bañarte de inmediato.

Evita pegarte a las paredes del metro porque a veces conducen electricidad que no es letal, pero te da una buena descarga. No te pongas loco. No hay nada peor que escuchar los silbiditos anónimos de los menos pacientes o contagiarle tu estrés a tus vecinos de desgracia.