A propósito de la locura en que se está convirtiendo nuestra ciudad el día de hoy,decidimos recuperar esta sesudísima guía para el político, empresario, sindicato o la celebridad que busca “acarrear” a docenas de almas y no morir de vergüenza en el intento. En realidad, es asunto de tener tantito sentido común.

INVITE A UNA CELEBRIDAD

Puede que su “acarreado” no tenga idea de lo que es la Reforma Política, el problema de la violencia en su localidad o el profundo problema del drenaje profundo, pero su mente se verá aclarada y distraída para bien si invita a algún famoso.

Si la concurrencia es masculina, invite a una “primera actriz” de sinuosos volúmenes corporales (en una de esas, hasta se casa con ella); si hay muchos niños, a un luchador enmascarado; si trata con señoras y mujeres jovenes, algún galán de la pantalla chica hará el truco (en una de esas, hasta se cas… no… ¿algún famoso ha andado con alguna fémina política?).

Después de que los gritos y la emoción se calmen un poco,no importa lo que diga por la increíble distracción de la gente. Y de los medios de comunicación, que andaremos también en las nubes.

COMPÓNGASE UNA CUMBIA

Es así de sencillo: puede hacer que la gente escuche y se informe o puede ponerla a bailar con una cumbia que nada más grite a los cuatro vientos algo como “ENRIQUETA, ENRIQUETA, GUAPA GUAPA EN LA BOLETA”.

No hay falla.

¡GALLETITA, REFRESCO, SANDWICH, GALLETITA!

Haga de cuenta que ya los tiene ahí, más o menos informados de dónde están parados. ¡Mínima decencia, si a uno le están haciendo el favor de ser “acarreado”, darles algún refrigerio!

Que si la hojaldra con queso amarillito y jamón medio rancio, que si el refresco naranja fosforescente, que si la galleta de animalito. ¡Digo! ¡Es la gente los que los hace ver como poderosísimos y llenos de gloria! Un detallito.

¡ENTERARLOS DE DÓNDE ESTÁN!

¡Por el amor del Todopoderoso! ¿A nadie se le ocurrió que algún medio informativo podía hacerles la “jugarreta” de entrevistar a los asistentes? Un papelito, no exigimos más, con explicaciones brevísimas de a dónde se dirigían y el nombre del principal involucrado.

O un microfonito en el camión diciéndole a la gente todos los desplantes de felicidad que el candidato “X” les iba a brindar si se paraban ahí. Es de la lógica más elemental.

DESPENSAS MÁS VARIADAS

Una parte esencial del “acarreo” es repartir despensas ínfimas para el invitado. Deben incluir unos litros de leche, una bolsita de frijoles, arroz por aquí y por allá, panecito dulce, etcétera.

Pero hay que meterle un poco más de emoción: organícese una rifa, donde pueden estar en juego un viaje a Disney (con visas incluidas… total, el poder es el poder), una televisión grandotototototota (en México eso importa tanto como una carrera universitaria) o una cena con la celebridad que antes invitó.

La gente, si la trata así, no va a andar voltéandolo de cabeza.

3147-https://www.youtube.com/watch?v=AfzCixTfv9E

¿Recuerdan el video de Efekto TV (2012) sobre un acto de campaña de Eruviel Ávila (en donde no se apareció, por cierto), candidato del PRI a la gobernatura del Estado de México, en donde entrevistaron a varios de los presentes para saber, bien a bien, por qué estaban en el acto proselititsta? Sí, como imaginarán desgraciadamente (falta ver el video), algunos de los cuestionados no sabían siquiera el nombre del abanderado tricolor. Mal, muy mal.

No señalamos a Eruviel ni al Revolucionario Institucional como los únicos culpables del asunto (sabemos que en México, todo político se pone de pastor de ovejas de vez en cuando), pero sí nos llena de gracia el hecho de que, si las cosas se van a hacer mal, se tienen que hacer bien primero. ¿No?